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MADRID, 17 de diciembre (EUROPA PRESS) –
El Parlamento español ha finalizado un proceso para ratificar el acuerdo de pesca entre España y Portugal firmado el pasado 28 de junio en Luxemburgo por el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, y el ministro del Mar de Portugal, Ricardo Serrao Santos y que llega en vigor el 1 de enero de 2022.
Este convenio, que tendrá una duración de 5 años, ampliándose a dos más, regirá los plazos de ejecución de las actividades pesqueras españolas y portuguesas en aguas fronterizas y, según el Ministerio de Agricultura, “a. Ambos países “.
Según el Ministerio, estas medidas “responden” a las demandas de la industria española, en particular del arrastre del Cantábrico Noroeste y del cerco y arrastre Golfo de Cádiz, que ha venido exigiendo “acuerdos firmes, permanentes y equitativos. los paises “.
La medida regula aspectos como el control del horario de descenso de acuerdo con los horarios establecidos en las leyes de cada país. En el caso de los barcos, no podrán descargar su pescado en puertos extranjeros durante el fin de semana (maniobra que responde a una de las reclamaciones de un barco español, que por normativa nacional están obligados a parar los fines de semana, a diferencia de los portugueses). barcos, que están permitidos. pesca).
Además, también incluye medidas técnicas, como la prohibición de las cascadas españolas o la armonización de medidas de gestión, como el cierre biológico para el rastreo en otoño de la bahía de Cádiz.
Asimismo, se incluye el permiso para desembarcar en los puertos de España y Portugal, independientemente de dónde se realice posteriormente la primera venta. “Los barcos deben pagar impuestos en el terreno donde se realiza el desembarque y acompañados del pescado y el certificado de embarque hasta el lugar de primera venta”, indica el reglamento.
El convenio también estipula el mantenimiento de importantes posibilidades de pesca a través del número de licencias establecidas hasta el momento para ambos buques, en aguas interiores y en el convenio fronterizo Miño-Guadiana.
Por último, también se ha puesto en marcha el fortalecimiento de la coordinación y el intercambio de información entre las dos partes para el seguimiento de las actividades pesqueras en las aguas del otro lado.