Vargas Llosa y Patricia Llosa disfrutan un verano literario entre ayunos y la tarta Sacher en Salzburgo

Un reencuentro en el paraíso

Después de ocho años separados, el reconocido escritor peruano Mario Vargas Llosa y su exesposa Patricia Llosa han disfrutado de un verano lleno de literatura y gastronomía en la hermosa ciudad de Salzburgo. En un artículo publicado en El País, Vargas Llosa describe su reconciliación con Patricia y las dos semanas que pasaron juntos en esta ciudad austríaca. Según el autor de “La casa verde” y “La ciudad y los perros”, estas vacaciones les han permitido escapar de la realidad y sumergirse en un mundo de sueños y espejismos.

Un festival musical y una tradición renovada

Como en cada verano europeo desde hace décadas, Vargas Llosa asistió al festival musical de Salzburgo por invitación del empresario suizo Ernst Keller. Durante su estadía, el escritor disfrutó de conciertos matutinos y dedicó las mañanas a la intensa lectura de novelas acumuladas a lo largo del año. Pero antes de llegar a Salzburgo, Vargas Llosa y Patricia pasaron tres semanas haciendo dieta en la clínica Buchinger de Marbella, una tradición que han retomado en su renovada relación. Después de su “cuarentena de alimentos”, se dieron el gusto de probar las delicias culinarias de Salzburgo, como las jugosas salchichas del Café Tomaselli y la famosa tarta Sachertorte del Hotel Sacher.

Un enclave civilizado y una rutina apacible

Vargas Llosa, en su artículo para El País, describe la vida apacible que ha disfrutado en Salzburgo. Su rutina diaria incluía levantarse temprano, tomar desayuno y dar un paseo por el río Salzach, que separa Austria de Alemania. Además de los compromisos musicales y las intensas lecturas, el escritor y su exesposa también se deleitaron con las tradiciones culinarias de la ciudad. Según Vargas Llosa, las costumbres en Salzburgo no han variado mucho desde su primera visita en 1987, lo que le ha permitido disfrutar de un enclave civilizado y lleno de encanto.

Un futuro literario y una dedicación a Sartre

A sus 87 años, Vargas Llosa no muestra signos de disminuir su ritmo de vida, tanto en lo romántico como en lo literario. Según fuentes cercanas al escritor, ha dedicado todo el verano a releer y estudiar la obra de Jean-Paul Sartre, con la intención de desarrollar un ensayo o libro sobre el autor de “La náusea”. Vargas Llosa siente una gran influencia de Sartre y comparte con él la devoción por Flaubert y su obra “Madame Bovary”. Además, el escritor ha dejado entrever que su próximo libro, titulado “Le dedico mi silencio”, podría contener un mensaje oculto sobre su vida amorosa.

En resumen, el verano literario de Vargas Llosa y Patricia Llosa en Salzburgo ha sido una experiencia llena de reencuentros, tradiciones y pasiones compartidas. Han disfrutado de la música, la literatura y la gastronomía, encontrando en esta ciudad austríaca un refugio para escapar de la realidad y sumergirse en un mundo de sueños y espejismos. A sus 87 años, Vargas Llosa sigue demostrando su pasión por la escritura y su dedicación a explorar nuevos temas y autores. Sin duda, este verano ha sido un capítulo más en la vida de uno de los escritores más importantes de nuestra época.