Descubre el apasionante juicio culinario de Teresa entre misterios y sabores, dirigido por Blanca Portillo y Paula Ortiz

  • La actriz Blanca Portillo y la directora Paula Ortiz se unen en un retrato sensorial de la escritora santa Teresa de Jesús.
  • La película se basa en la obra teatral de Juan Mayorga y explora la idea de la cocina como escenario de la experiencia espiritual de Teresa.
  • La película propone un juicio teológico y personal que enjuicia el vuelo imaginativo de la santa ante una Iglesia que rechaza su singularidad.
  • Paula Ortiz muestra su querencia por reinterpretar los clásicos de la literatura en una experiencia estética ultrasensorial.

Retrato sensorial de la escritora santa Teresa de Jesús

La actriz Blanca Portillo y la directora Paula Ortiz se unen en la película Teresa para realizar un retrato sensorial de la escritora santa Teresa de Jesús. Basada en la obra teatral de Juan Mayorga, la película explora la idea de la cocina como escenario de la experiencia espiritual de Teresa. La película propone un juicio teológico y personal que enjuicia el vuelo imaginativo de la santa ante una Iglesia que rechaza su singularidad. Con un intrincado y difícil pulso entre imagen y texto, la película busca transmitir el poder del trance de Teresa frente al inquisidor.

La reinterpretación de los clásicos de la literatura

La directora Paula Ortiz, conocida por su querencia por reinterpretar los clásicos de la literatura, vuelve a mostrar su habilidad en Teresa. A través de una experiencia estética ultrasensorial, Ortiz busca transmitir la intensidad y el delirio de la historia de Teresa de Jesús. Sin embargo, la película encalla en sus excesos, especialmente en el duelo entre la santa y el inquisidor, que peca de pompa y se vuelve demasiado intenso. A pesar de esto, la película logra desplegar con audacia su retórica visual y ofrece una visión única de la vida de la escritora santa.

El papel de Blanca Portillo y la dirección de Paula Ortiz

Blanca Portillo, en el papel de Teresa de Jesús, ofrece una interpretación magnética y capaz de transmitir sin esfuerzo el poder de su trance frente al inquisidor. Por su parte, la directora Paula Ortiz demuestra su habilidad para crear una experiencia estética ultrasensorial, aunque en ocasiones no logra mezclar bien la pompa y la intensidad de la historia. A pesar de esto, la película logra explorar el retrato sensorial de la escritora santa y ofrece una visión única de su vida y obra.

La cocina como escenario de la experiencia espiritual

Uno de los aspectos más interesantes de la película es la exploración de la cocina como escenario de la experiencia espiritual de Teresa de Jesús. Inspirada en las palabras de la santa, Entre los pucheros anda el Señor, la película muestra cómo la cocina del convento se convierte en el escenario de un proceso que enjuicia el vuelo imaginativo de la santa. Esta idea ya ha sido explorada por la artista Marina Abramovic en su obra The Kitchen, de 2009, y por el dramaturgo Juan Mayorga en su obra Teresa o el sol por dentro. En Teresa, la cocina del convento se convierte en un lugar de juicio teológico y personal, donde se enfrentan la singularidad de la santa y la ortodoxia de la Iglesia.

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