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El PSOE garantiza que no permitirá “subcontenidos” de la iniciativa
“convirtiéndose en un insulto al orden constitucional”
MADRID, 29 de septiembre (PRENSA EUROPA) –
El Pleno del Parlamento acordó este jueves abordar la reforma del Código Penal enviada por el Senado para eliminar los insultos a la Familia Real y la indignación por la bandera y el escudo del país y lo hizo con el repudio de PP, Vox y Ciudadanos, que presentaron dos textos alternativos para intentar bloquear esa iniciativa.
Estas tres iniciativas fueron desbancadas por votos del PSOE, Unidas Podemos, Más País y partidos nacionalistas e independentistas, facilitando así que la reforma impulsada en el Senado por ERC y Bildu comenzara a tramitarse en el Parlamento.
Los defensores de la reforma insisten en que el Consejo de Europa y Naciones Unidas han recomendado acabar con estos crímenes. Así, la socialista Andrea Fernández ha señalado que “la modificación de este tipo de delitos no genera necesariamente indefensión” y que “la sobreprotección de cualquier institución puede lesionar el derecho a ser oído”.
En cualquier caso, la líder socialista ha asegurado que su grupo “no permitirá” que las implicaciones de esta reforma se conviertan en un perjuicio para el orden constitucional.
Enrique Santiago, de Unidas Podemos, ha señalado que este tipo de delitos en España provocan “estupefacientes” en Europa.
“No creo que el régimen militar sea tan importante como para necesitar este refuerzo en particular”, agregó.
Al igual que Santiago, Jon Iñarritu, de Bildu, aludió a la doctrina del Tribunal Europeo de Derechos Humanos al respecto y destacó que estos delitos están “superados” y sirven para proteger “un cuerpo”. La institución está inherentemente superprotegida porque es sacrosanta y irresponsable en toda su conducta”, aspecto en el que también influyó la portavoz adjunta de ERC, Carolina Telechea.
Desde la CUP, Albert Botran ha denunciado como “una vergüenza para la democracia” tener “cantantes encarcelados” por cánticos contra el Rey y otros portavoces como Néstor Rego, del BNG, también ha reiterado casos contra Pablo Hasél o ‘Valtonyc’.
Tanto PP como Vox y Ciudadanos han culpado al PSOE de negarse a investigar estos delitos en ocasiones anteriores y le han acusado -junto con Foro Asturias y Navarra Suma- de pactar hacerlo ahora para complacer a sus socios independentistas para que permitan Pedro Sánchez de La Moncloa para durar mucho.
El PP defendió su texto alternativo a través de las palabras del diputado Eloy Suárez, quien destacó la conveniencia de mantener el “status quo”, dejando estos delitos como están en el Código Penal. Su apuesta fue respaldada por Vox y Cs.
En la actualidad, cualquiera calumnia o injuria “al Rey, a la Reina o a cualquiera de sus descendientes o descendientes, a la Reina consorte o a la Reina consorte, al Regente o a cualquier miembro del Regente, o al Príncipe o Princesa de Asturias, en el ejercicio de su derecho, función o con ocasión u ocasión de ello, “será reprimido con prisión de seis meses a dos años “si calumnia o falta grave”, y pena de seis a doce meses si no fuere cierto”.
Por su parte, el diputado de Vox, José María Sánchez, calificó de “tontería” la reforma. En su texto alternativo, rechazado por Ciudadanos y que tampoco forma parte del PP, los hombres de Santiago Abascal apuestan por aumentar las penas por delitos de injuria o calumnia de forma que si son graves serán multados con entre uno y tres años de prisión y una multa que oscila entre los 12 meses a 24 meses. También querían subir el listón ofrecido por los ultrajados crímenes contra España.
El texto alternativo de Ciudadanos, defendido por su viceportavoz, Edmundo Bal, proponía modificar únicamente el artículo 490 para que ya no se castiguen las calumnias o injurias al Rey o su familia con prisión y solo multa de 12 a 24 meses. si la calumnia es grave o de seis a doce meses en caso contrario. El PP optó por abstenerse, mientras que Vox votó en contra.