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- UNRWA es la Agencia de Naciones Unidas para la población refugiada de Palestina en Oriente Medio. Desde 1949 trabajamos para proporcionar asistencia, protección y defensa a más de 5 millones de refugiados y refugiadas de Palestina, que representan más de la quinta parte de los refugiados del mundo y que actualmente viven en campamentos de refugiados en Jordania, Líbano, Siria y el territorio Palestino ocupado (la franja de Gaza y Cisjordania), a la espera de una solución pacífica y duradera a su difícil situación.
- Ser mujer y vivir bajo la guerra en Gaza Naema, embarazada de nueve meses, tuvo que huir del intenso ataque aéreo en su barrio y caminar horas hasta llegar al centro de Gaza
- Casi 1,3 millones de personas en Gaza, de los , se refugian en instalaciones de la
- Las escuelas refugio están masificadas y miles se agolpan en dichas instalaciones que actualmente albergan cuatro veces más personas de su capacidad.
- En una de las escuelas ubicada en la , al sur de la franja de Gaza, las mujeres hacen fuego e intentan hornear pan. Otras hacen largas colas para ir al baño. Y otras lavan la ropa de sus hijos y tratan de encontrar un lugar donde colgarla para que se seque. Todo esto bajo condiciones severas de , un contexto en el que las mujeres son las más afectadas, también en este conflicto.
- A la tradicional que las mujeres asumen históricamente, se le suma las atrocidades de una guerra incontrolable, la pérdida y la incapacidad de satisfacer las necesidades más básicas de sus familias.
- En una de las , en un pasillo, vive ahora la familia Abu Sharikh. Naema Abu Sharikh acaba de dar a luz a su hija mediante cesárea y duerme sobre un colchón fino que no la protege del frío del suelo. de Rafah, que tiene un clima desértico, construyeron una tienda de campaña que carece de todas las necesidades mínimas básicas para la vida y menos aún para un recién nacido.
- Hace seis semanas, Naema, que estaba en su , tuvo que huir del intenso ataque aéreo en el barrio de Almokhabarat, en la parte norte de la ciudad de Gaza, y caminar horas hasta llegar al centro de la Franja.
- Aún aterrada, intentaba describir de diferentes maneras el momento de salir de su casa y caminar durante cuatro horas. Pero el llanto no se lo permitió.
- a pesar de su clara necesidad de cuidados”, explica su marido Sharaf.
- Debido al gran número de personas desplazadas que alberga la ciudad de Rafah, el hospital de maternidad de Alhela ha reducido sus servicios prenatales para
- En situaciones normales, las madres deben permanecer al menos unos días en el hospital después de una cesárea. Sin embargo, durante la guerra, el hospital se ve al día siguiente de sus operaciones, ya que no pueden mantener una cama ocupada por más tiempo.
- Las pésimas condiciones higiénicas de los masificados refugios han provocado la infección de la cicatriz de Naema, lo que le produce un dolor enorme. explica su marido. Ahora todos temen que su infección empeore y corra peligro su vida.
- Asma Othman, otra de las personas refugiadas en la misma escuela, vivía en una casa en el campamento de refugiados de Rafah. La madre de cuatro hijos recuerda la huida de su casa como un momento aterrador: “Caminamos al amanecer tras una explosión masiva que afectó a nuestros vecinos”. Asma cogió a sus hijos y huyó a pie por la calle en busca de seguridad.
- “Mi marido y su hermano se quedaron paralizados y . Otro ataque aéreo tuvo lugar cuando dos de sus cuñados corrieron hacia su casa destruida para rescatar a sus hermanos con discapacidad. “Sentí que a mi esposo y a su hermano”.
- La familia donde permanecen con serias dudas sobre su futuro: . La cantidad de agua que UNRWA puede proporcionar, dada las inmensas necesidades, no es suficiente para mantener limpio el lugar ni para mantener la higiene personal.
- La mayor preocupación de Asma es su marido, que necesita cuidados intensivos y medicamentos que no tiene a su alcance: “Mientras el hospital está lleno de muertos y heridos, mi marido empeora y por la falta de apertura de corredores humanitarios que permitan la entrada de ayuda humanitaria con fluidez y combustible, sigue proporcionando servicios sanitarios, psicológicos y alimentos a la población gazatí. Pero no es suficiente. La población de Gaza está atravesando una de las peores horas de su historia.
La difícil situación de los refugiados palestinos en Oriente Medio
La Agencia de Naciones Unidas para la población refugiada de Palestina en Oriente Medio (UNRWA) trabaja desde 1949 para proporcionar asistencia, protección y defensa a más de 5 millones de refugiados y refugiadas de Palestina. Estos representan más de la quinta parte de los refugiados del mundo y actualmente viven en campamentos de refugiados en Jordania, Líbano, Siria y el territorio Palestino ocupado. La situación de estos refugiados es difícil, ya que viven a la espera de una solución pacífica y duradera a su situación.
La guerra en Gaza ha agravado aún más la situación de los refugiados palestinos, especialmente de las mujeres. Las condiciones en los refugios están masificadas y las mujeres se ven afectadas por la falta de higiene y las dificultades para satisfacer las necesidades básicas de sus familias. Además, los servicios de atención médica son limitados y muchas mujeres no reciben el cuidado necesario durante el embarazo y el parto. La falta de corredores humanitarios y la escasez de recursos dificultan aún más la situación, poniendo en peligro la vida de muchas personas.
El impacto de la guerra en las mujeres de Gaza
Las mujeres de Gaza se enfrentan a condiciones severas debido a la guerra y la falta de recursos. Muchas de ellas han tenido que huir de sus hogares y caminar durante horas en busca de seguridad. En los refugios, las mujeres se ven obligadas a realizar tareas como cocinar, lavar la ropa y cuidar de sus hijos en condiciones difíciles. Además, las mujeres embarazadas y las que han dado a luz recientemente no reciben la atención médica necesaria y corren el riesgo de sufrir complicaciones debido a las malas condiciones higiénicas.
La falta de recursos también afecta a las mujeres que necesitan cuidados intensivos y medicamentos. Muchas de ellas no tienen acceso a los servicios médicos necesarios y corren el riesgo de empeorar su estado de salud. La situación de las mujeres en Gaza es especialmente preocupante, ya que se enfrentan a la violencia de la guerra y a la falta de recursos básicos para sobrevivir. Es necesario tomar medidas urgentes para garantizar la seguridad y el bienestar de las mujeres en esta situación de crisis.