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MADRID, 5 de septiembre (EUROPA PRESS) –
La actividad comercial del sector servicios en España aumentó durante el mes de agosto, aunque el ritmo de crecimiento fue bajo, como muestra el Índice de Gerentes de Compra (PMI), elaborado por S&P Global, que en el octavo mes del año se detuvo. en 50,6 puntos, en comparación con un total de 53,8 el mes pasado.
“La economía española tuvo una tendencia a la baja en agosto con el sector de servicios siguiendo el ejemplo del sector manufacturero al registrar solo un crecimiento modesto”, dijo Paul Smith, economista jefe de S&P Global Market Intelligence.
El experto ha advertido que las empresas temen que la volatilidad y la inflación afecten a los clientes, lo que se suma a las preocupaciones de que la economía se dirige hacia un “invierno desafiante y una posible recesión”.
Las empresas señalaron que las ventas nacionales y extranjeras eran bajas. Los nuevos pedidos de exportación cayeron por segundo mes consecutivo ya un ritmo más pronunciado que el registrado para los nuevos pedidos en general.
Por su parte, los precios continuaron mostrando signos de “alta inflación”. Sin embargo, un estudio de S&P concluye que los precios pagados por los insumos, así como los precios finales cobrados, “aumentaron a tasas más lentas”.
“El petróleo, la energía y los salarios continuaron siendo las principales fuentes del alza de los precios, que en general aumentaron en agosto por vigésimo séptimo mes consecutivo. Sin embargo, la tasa de inflación mantuvo su reciente tendencia a la baja, cayendo a su nivel más bajo desde octubre”, señaló. concluyó. informe elaborado por la empresa.