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El río Misisipi, a menudo descrito como la columna vertebral de Estados Unidos, se encuentra en una situación crítica. La combinación de la sequía extrema y el aumento del nivel del mar está permitiendo que el agua salada se infiltre cada vez más en su cauce. Este fenómeno amenaza no solo a la fauna y flora del río, sino también a las comunidades que dependen de él para su suministro de agua.
Durante varios meses, los residentes de varias localidades a lo largo del Misisipi han tenido que recurrir al agua embotellada debido a la amenaza que supone el consumo de agua del río. La sequía en el medio oeste del país y el aumento del nivel del mar han provocado que una cuña de agua salada, de una densidad sin precedentes, avance río arriba. Un factor adicional en la creciente salinización es el dragado regular de la parte sur del río por parte del Cuerpo de Ingenieros del Ejército. Este proceso, necesario para facilitar la navegación de grandes cargueros, está permitiendo que el agua salada se infiltre aún más.
Las autoridades de Plaquemines, el municipio más afectado por su proximidad al golfo, han tenido que adoptar medidas para proporcionar agua potable a sus residentes. Entre las soluciones se incluyen la distribución de agua embotellada y el uso de buques con contenedores de agua dulce para diluir el agua salada antes de que entre en la red de consumo humano. Las previsiones iniciales sugerían que el agua salada podría llegar a Nueva Orleans a finales de octubre, lo que desató una serie de preparativos de emergencia, incluyendo la construcción de una tubería de emergencia de 250 millones de dólares.
Aunque la amenaza inmediata ha disminuido gracias a las recientes lluvias y a una especie de presa submarina construida por el Cuerpo de Ingenieros, los expertos advierten que estas son soluciones temporales. La intrusión salada de este año se considera una señal de alarma, ya que se espera que este fenómeno se repita cada vez con más frecuencia y expansión. El Misisipi es más que un río para Estados Unidos; es una parte integral de su historia y cultura. La amenaza actual a su salud y viabilidad es un recordatorio de los desafíos a largo plazo que plantea el cambio climático y la necesidad de soluciones sostenibles y a largo plazo.